En un pueblo rural francés, un terrateniente codicioso llamado Le Papet y su sobrino Ugolin, conspiran para bloquear la única fuente de agua potable de una propiedad colindante a la suya. Tras matar a su propietario, esperan que el nuevo heredero, en vista del poco valor que tendría la propiedad (han sellado el manantial para que nadie sepa de su existencia), se vea obligado a vender a bajo precio. El heredero es un recaudador de impuestos de ciudad, jorobado, con mujer e hija. A pesar de no contar con agua, éste quiere establecerse y comenzar a cultivar y criar animales.